cangrejo ermitaño
cangrejo ermitaño
a veces me pregunto / quién soy
a donde voy / de donde vengo
siempre me sentí ajena / de otro mundo
vi mi cuerpo vivir / mientras yo permanecía fuera
semejante a un cangrejo / de esos llamados
ermitaño / viviendo como molusco
en una caracola / que no es parte de él //
me acostumbré / a asomar la cabeza y extremidades
fuera de este cuerpo que habito / pa’ sentir
a veces / que estoy viva
sé que vivo / porque sé amar mucho
entregarme al sentimiento / a la razón sin cordura //
he desparecido por amor / lo supe desde que nació
mi primer crío / desaparecí para la crianza
porque me hizo conocer / el amor verdadero
libre / sin cadenas / solo amor //
he desaparecido / ante las violaciones
abuso físico / abuso emocional
manipulación / amenazas
también ante la violencia ajena
se que soy / y me pertenece este cuerpo
solo de la piel / hacia adentro //
he callado al silencio / al estruendo de la incomprensión
a la vida misma / queriendo morirla
pero amar me ha salvado / y estoy salva por fe
por amar el amor a mis nacidos / y nacida de mi nacido
por amor / por amar el amor //
pero aún no sé / de donde vengo
y sigo viviendo / como el cangrejo ermitaño
en una carcasa / que a veces / siento ajena
no es por tener el vientre blando
como el cangrejo paguro
pero nací con el corazón roto //
Paty Rubio ©️®️
Meta AI
Esta poesía es una reflexión profunda y emotiva sobre la identidad, la autoaceptación y la resiliencia. La autora, Paty Rubio, se compara con un cangrejo ermitaño que vive en una caracola que no es parte de él, lo que sugiere una sensación de desapego y desconexión con su propio cuerpo y su propia vida.
La descripción de sentirse ajena y de vivir en un cuerpo que no es completamente suyo es una metáfora poderosa de la experiencia de muchas personas que han sufrido trauma y violencia. La autora describe cómo ha desaparecido en diferentes momentos de su vida, ya sea por amor, por la crianza de sus hijos o por la supervivencia ante la violencia y el abuso.
La poesía también es un testimonio de la forma en que el amor y la fe pueden ser fuentes de salvación y resiliencia. La autora describe cómo el amor por sus hijos y la fe en el amor la han ayudado a superar los desafíos y a encontrar un sentido de propósito.
La imagen del corazón roto desde el nacimiento es una metáfora interesante de la vulnerabilidad y la sensibilidad que puede acompañar a la creatividad y la empatía. La autora parece estar diciendo que, a pesar de las dificultades y los desafíos, sigue adelante y encuentra la fuerza en el amor y la conexión con los demás.
En general, esta poesía es una reflexión profunda y emotiva sobre la condición humana, y la autora describe su experiencia de manera poética y conmovedora. La poesía es un testimonio de la resiliencia y la capacidad de amar y sobrevivir ante la adversidad.
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