Dejando el aliento y la piel

no hay camino sin cayado / sin tu camino no hay vereda / sin existencia qué que no haya marcado con tu paso // y yo tengo el mapa de caminos de veredas que tú has destacado // y queda obsoleta / la carnalidad porque te amo / más allá del cuerpo porque entre caminos y veredas soy tu báculo / sin que me veas y estoy a tu lado // como arriba el cielo / las nubes y abajo el campo / los pastos la madre tierra // yo solo se que vivo / porque tengo tus pasos marcados / como tu mano en mi cuerpo como tu cayado báculo / voy cuidando tu andar // no hay camino / sin ti ni vereda que no marque tu paso porque en realidad tú eres mi vara y mi cayado // tú el amor / que me da vida tú el lago que sacia mi ser / que me da frescura tú / tú / mi amor / que tengo / eternizado // 67227 Paty Rubio

  debajo de la cama salen las ausencias lenguas de gélido fuego ciegan mis oídos ensordecen mis ojos congelan mi sexo y me queman el esqueleto me cortan el aliento asfixian los latidos de una entraña oxidada de olvido las arañas en el cielo raso asustadas observan y encogen una a una sus ocho patas desean salvarse de morir ¡inútil afán! porque la muerte de ausencia es dolorosa cruel y nauseabunda por debajo de la cama salen las ausencias y m e e n v u e l v e n e n s u g é l i d o f u e g o Paty Rubio ©®

  A manera de epígrafe de mi narrativa: Se termina este 2024, yo veo cada día más de cerca la meta que me hará llegar al viaje de partida hacia el verdadero hogar. Recordé en esto a mi madre. El único de mis seres amados fallecidos, que partió en mi compañía y vi de lleno y sentí de lleno cómo se le fue la vida, en ese ultimo suspiro cuando su chispa Divina abandonó su cuerpo, ese ropaje que le vistió en este viaje de nave tierra. Y su luz retornó al hogar. Tal vez soy cruda al describir el hecho, pero lo hago con amor y es un suceso que me impactó ya que además de ser el único ser que me ha tocado, se trataba de mi madre hermosa. A quien ya más pronto veré de nuevo. Con amor Madre hermosa Paty tu hija. Ropajes Un día fui testigo de que el alma sale del cuerpo, en el último suspiro. Es cuando ese cuerpo se suelta sin sentidos. Como un vestido, tirado donde le tocó quedarse al azar. Y poco a poco se va enfriando sin el calor con el que esa alma de luz, da la vida, y el placer de re...

  muchas veces he dicho que no nací completa será pues porque no estaba lista pa'nacer razón que me ha hecho sentir fuera de este mundo y me empato más con las estrellas de lo que puedo sentirme como terrestre y tal sea la causa de esta desazón clavada en los huesos de esta nostalgia parida a suspiros tanto como lloros a rayos ennegrecidos como pólvora de esta locura entre oleos creados y letras paridas y toda esta rebeldía que me nace desde el tuétano acogotado perdón pido a mis hijos por tanta sinrazón que han tenido que mamar por tanto deseo de irme aunque los he amado hasta la locura perdón por no seguir las recetas del barro con que crecí en la cocina materna con sus puntos y comas y sus pizcas o puños y cucharadas por poner con rebeldía en cada comida mi sello personal saliéndome de lo enseñado por mi madre y abuela por seguir el rumbo de mis pies alados entre el humo de mariguana o los vapores alcoholizados o las letras de un asfalto con sangre por alimentar a esta oveja ne...

  Nudos de invierno Parada frente al espejo, apenas a cinco días de un nuevo año. En un intento por olvidarme del frío. Hoy no sé si este frío viene del clima, o nace desde el hielo de mis huesos. El espejo me habla, me dice mírame y aquí encontraras la respuesta. Y yo me asomo y veo unos rizos alborotados que como lenguas enroscadas tantean el aire que me circunda. Eso las obliga a encogerse en el intento por escapar del aire gélido y se tornan blancuzcas, casi azuladas salpicadas de algunas venas aún oscuras, lo que hace que mi cabello no luzca completamente blanco como la nieve sino grisáceo. Mi cuerpo se cimbra exigiendo una prenda más sobre de él. Inútil afán por escapar de esta gélida, existencia. Hoy siento que escurrieran lágrimas ante la imagen, pero cuando intento secar con mis dedos esas lágrimas, me encuentro que no hay tales. Me pregunto ¿Será que es tanto lo que he llorado, que ya se terminaron mis lágrimas y solo está en mi recuerdo de tantos lloros? Levanto los ho...